Miro al cielo, y sólo veo luz
ya nada importa, todo es azul
pájaros de niebla se esfuman tras un velo
respiro sin quererlo, nado sin ser prisionero.
Mira más allá de tus credos
nada es tan importante e indispensable
como el sonreír bajo la lluvia
chapoteando lágrimas del pasado
todo cuento tiene un fin.
Ya el viento baila con el ciruelo
y todo Dios es puro anhelo
por seguir siendo lo que nos propusieron
y no nos dimos cuenta que el viaje debe ser placentero
corto, pero duradero.
Silbando bajo mi corbata
todo es más ligero.
Toco tu pelo, huelo tus ojos
y despego sin saberlo.
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